domingo, 22 de mayo de 2011

Lo Veo...

Despierto y dormido

espero tu vida,
tan ido e indefenso
me cayó con todo el golpe.
Tu mirada y tu verbo
de pronto callaron
quizás no por tu ego,
será por mi nombre?

Su cuerpo se escurre
como escurro el viento,
su sueño no es sueño
cuando voy despierto.
Él sabe lo que digo
antes de pensarlo,
aun no tiene miedo,
él sabe que corro.

De pronto dos días
y sigo sin sueño,
aun tu alma vacía
me invita a tu lecho.
Tu músculo de sangre,
sin amor te desangra,
mi sombra te sigue
hasta el mismo infierno.

Quiero mi guía que ayude a salir,
quiero una amiga que sepa gemir.
Quiero un amor púbico, caliente y húmedo
(una pelota de fútbol y un gol cojonudo).

Despierto del sueño
y cierro los ojos,
tu risa insensible,
tus gestos de loco.
No soy más el sueño,
el sueño del viejo,
no eres como el otro,
sigues siendo un ciego.

Mi risa te ofende
cuando yo no lloro,
tu mente de cielo
se rompe en el fondo.
Si salgo a la calle
no llevo más cosas.
Un iPod y un chino
para oir bien el coro.

Saludo al vecino,
me tira la escoba,
lo miro y me piro
a ver a su esposa.
Su vara da golpes,
(te siembra en la calle).
Él es un milico,
él tiene la llave.

(Quiero tu guía que ayuda a sentir)
Sin risas, ni penas el vecino alegre
escupe a la gente sentado en mi trono.
Yo entiendo y tu entiendes, su mente un poroto.